Cualquier iniciado en el heavy hispano convendría en que Crisis de Fe son una de las formaciones con más proyección que ha dado el género en los últimos años. Alejados de las tendencias de turno, el quinteto valenciano se ha ganado a pulso su status como banda de culto entre metaleros de ambos lados del Atlántico gracias a su heavy clásico de raíz ochentera y textos personales.
Fue hace un lustro cuando sorprendieron con su primerizo "En compañía de lobos", un trabajo que, desde la independencia, les lleva por buena parte del estado español y les permite descargar junto a bandas como Obús, Barón Rojo, Dark Moor o Saratoga, así como a participar en un tributo a Manowar editado por el sello italiano Northwind Records.
Fue a finales de 2003 cuando vio la luz Razas de noche, grabado en los estudios navarros Sonido XXI, un álbum mucho más maduro en el que se terminaba de definirse el particular heavy metal de Crisis de Fe, y con el que terminan de consolidarse como una de las bandas más importantes de la zona levantina, comenzando a llamar con fuerza a las puertas de la vanguardia del panorama estatal. Fue a finales de este año cuando la banda participó en el tributo a la mítica banda madrileña Panzer, editado por Red Dragon Records.
Ahora Crisis de Fe comienzan una nueva etapa con "III", de la mano de Maldito Records. Grabado en Studio 54 junto a su productor de confianza, Enrique Soriano, y masterizado en los prestigiosos estudios canadienses Infinite Wave Mastering por Dave Horrocks; el trabajo muestra a una banda madura que ha incorporado a sus ya consolidadas influencias del heavy clásico un fuerte influjo del hard rock anglosajón de los ochenta, en el que Juampa Pérez se reafirma como uno de los mejores vocalistas y letristas del rock estatal y donde Aleks Tomás junto Miguel tuset se revelan como una auténtica máquina de hacer riffs. Una vez más encontramos temas típicamente heavymetaleros como Toda mi bondad o Al infierno junto a otros más rockeros como Amanece en la ciudad, medios tiempos como Otra Historia (adaptación de un tema de los míticos Survivor) o la maravillosa balada El viejo reloj.
En definitiva, III nos muestra a una banda consolidada que huye de los clichés establecidos sin dejar de lado la potencia y busca a través de profundas letras su definitiva consagración entre los grandes del rock estatal.