Luis Prado (Alicante, 1972) lleva más de 40 años pegado a un piano. Y más de 20 facturando canciones redondas, ya sea al frente de Señor Mostaza , ese grupo valenciano reverenciado por la crítica de todo el país, y cuya discografía es ya objeto de culto, o en su,hasta ahora, único disco en solitario, "Mis Terrores Favoritos"
Al mismo tiempo, es un cotizado músico de sesión, que ha grabado y girado con M-Clan, Miguel Ríos, Malcolm Scarpa, Tequila, Caballero Reynaldo o Fito Cabrales, entre otros muchos. Prueba de que su cancionero tiene una rara capacidad atemporal al margen de modas es la elección de Bipolaridad ( Señor Mostaza/ Podemos Sonreír, 2011) como sintonía del programa “La Lengua moderna' (Cadena SER) , como también la inclusión por parte de David Trueba de “Todo me recuerda a tí” ( Señor Mostaza / Somos Poco prácticos, 2008 ) en su última película “Casi 40”.
Con Estoy gordo, el tema que abría el disco “Mis Terrores Favoritos”, se coló en las listas de los 50 más virales de Spotify en Argentina, México y Costa Rica.
Tras un paréntesis algo intimista con las entregas de sus particulares versiones a piano y voz de sus clásicos favoritos, Luis Prado ha vuelto al estudio de grabación con un puñado de nuevas canciones en las que, por suerte o por desgracia, no resulta difícil sentirse identificado...
1) Efectivamente, volviste a equivocarte y metiste la pata una vez más. ¿De qué modo? Uf, pues a saber. Tal vez confiaste en quien no debías, tal vez te reíste de quien no tocaba, puede que te faltara empatía en un momento concreto, o valentía para enfrentarte a según qué cosas, las posibilidades son infinitas… Pero una vez más, has sobrevivido. ¿Has salido más fuerte? Pues hombre, tampoco hay que pasarse… has salido.
Y una vez pasado el tsunami, te miras y sorprendes al comprobar que no tienes nada roto. Casi te da cosa admitir que no estás mal, que incluso puede que estés…bien. Tampoco muy bien, o súper bien, pero razonablemente bien, o incluso MODERADAMENTE BIEN. Y eso… está muy bien.
2) MODERADAMENTE BIEN es la última canción de Luis Prado. Tras el arranque marca de la casa (piano eléctrico Wurlitzer) nos cuenta la historia de alguien que no ha parado de cagarla últimamente, que prometió lo que no podía y se jugó lo que no tenía, pero que, a pesar de todo, no sólo sobrevive, sino que incluso, llega a encontrarse…bien. Tampoco muy bien, o súper bien, pero razonablemente bien, o MODERADAMENTE BIEN. Y eso…está muy bien.